Entrega de víveres: ¿clientelismo o ayuda social?

El diccionario de la Real Academia Española define el clientelismo como un sistema de protección y amparo con el que los poderosos patrocinan a quienes se acogen a ellos, a cambio de su sumisión y sus servicios. Esta definición parece ser acorde a la realidad de lo que sucede con los partidos políticos y la entrega de bolsas de alimentos en todo el país, con un notorio millonario desembolso.

La ayuda social, en cambio, se define como la acción humana propensa a paliar o resolver las necesidades de una persona o un grupo social. Esta puede proporcionarse de modo unilateral, cuando quien la recibe no la retribuye, o de modo recíproco, al beneficiarse ambas partes.

A menos de un mes para que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) convoque a elecciones generales, previstas para el 6 de septiembre, las agrupaciones políticas reconocen que entregan diferentes artículos promocionales, entre ellos alimentos, durante sus jornadas de afiliación o de posicionamiento; con el argumento, según sus dirigentes, de “cubrir las necesidades de los pobladores”.

El partido oficial no se exime de esta práctica, ya que sobre este pesa una sanción de Q1.9 millones, apelada el viernes pasado en la Corte Suprema de Justicia, por la inclusión de fotografías de su precandidato a presidente y una diputada en las Bolsas Seguras que se repartieron durante una actividad gubernamental en Huehuetenango.

El máximo ente electoral está imposibilitado de accionar contra este recurso promocional debido a que, para cuidarse la espalda, los políticos de oposición aseguran que fundaciones afines a ellos, que se identifican con sus mismos colores, se encargan de regalar alimentos, para bloquear la posibilidad de multarlos, porque no se contempla en la Ley Electoral y de Partidos Políticos.

Sin embargo, esa es solo una muestra de cómo los políticos han recurrido a la “creatividad” para no ser multados por el TSE y mantener una extensa campaña anticipada; tal como la invitación para enviar un mensaje de texto a Zury Ríos (aunque aparezca sin algún partido) para expresarle cómo debe ser un “gobierno diferente” o el llamado para que Javier Hernández (hoy candidato a diputado por la UCN) observe los problemas de la comunidad.

Además, figuran las rifas de motocicletas y la distribución de sillas de ruedas o andadores en el interior del país por Líder, UNE y Todos cuando sus precandidatos presidenciales acuden a las reuniones, o con patrocinio de aspirantes a diputados y alcaldes, así como donaciones de origen dudoso que tampoco son sujetas de ningún control, y que solo abonan la desconfianza sobre el financiamiento de los partidos y sus cuestionados fines altruistas.

Publicado el 13 de abril de 2015 en www.s21.com.gt por Editorial Siglo21
http://www.s21.com.gt/editorial/2015/04/13/entrega-viveres-clientelismo-ayuda-social

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