Algo se está moviendo

Evitar el descenso al caos.
Las reglas del juego político, contenidas o interpretadas de manera laxa en la Ley Electoral y de Partidos Políticos, actúan como repelente de líderes capaces y honestos, que podrían contribuir a rescatar a este país que desciende día a día, ante nuestros ojos impotentes, hacia los infiernos del Estado fallido, que no es ficción, está a la vuelta de la esquina y atrapa a 35 naciones. Y esas mismas reglas son miel para los mercaderes de la política, principales operadores del desastre.


Este año alrededor de Q1.8 millardos se emplearán en la campaña electoral, justamente un monto similar al que el Congreso destinó a las ONG en el Presupuesto 2015. Ahora bien, si el presidente Colom “invirtió” en su campaña unos Q300 millones, y Pérez Molina en torno a los Q500 millones en la suya, al ritmo los aspirantes “serios” a la Presidencia deberán disponer, contantes y sonantes, de unos Q800 millones. La regla de oro es, pues, acarrear quintales de dinero capaces de acarrear millares de votos.

Conocemos bien el círculo vicioso. Los gobernantes llegan a pagar deudas que arruinan las instituciones, vuelven ineficaz el gasto público y derrotan la moral tributaria. Cierto, en todos lados se requieren recursos para las campañas, pero el orden es otro: propuesta, organización y medios. Ese balance ayudó a que Costa Rica rompiera la inercia, y en su momento Brasil, Paraguay, Bolivia y Ecuador.

La pobreza y miseria atrapan en el círculo perverso a millones de personas, pero se palpa en zonas urbanas y rurales la fatiga frente a ese statu quo que cierra horizontes y repele a la población, sobre todo jóvenes, obligada a buscar la vida en otra parte. Elites atentas comienzan a reaccionar ante la inminencia del descenso al caos total. Con el realismo de abrazar una misión casi imposible, salen al público o en corrillos nombres de profesionales conocidos por su contribución cívica y política. Destacadamente, Edmond Mulet, especialista en lidiar en el mundo con los Estados fallidos; José Ángel López y Yuri Mellini, Manfredo Marroquín, Álvaro Velásquez y Mario Itzep, entre otros, además de políticos como Nineth Montenegro y Aníbal García que resisten desde la llanura.

Algo se está moviendo. Si esas iniciativas de rescate y reforma son eficaces, para lo cual es indispensable que sean arropadas por movimientos sociales, vastos sectores de las clases medias y grupos empresariales de toda escala, Guatemala puede romper la inercia y levantarse. No será fácil, pues en campaña electoral hay que soportar otras “reglas del juego”, en primer lugar, la descalificación, el deporte más popular entre nosotros, como dice Héctor Rosada. Es la oportunidad de cambiar las reglas del juego, ateniéndonos a ellas mismas. Si no se logra, más temprano que tarde nos enfrentaremos a ellas pero en condiciones mucho más críticas.

Publicado el 29 de enero de 2015 en www.elperiodico.com.gt por Edgar Gutiérrez
http://www.elperiodico.com.gt/es/20150129/opinion/7748/Algo-se-est%C3%A1-moviendo.htm

No Responses

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


The reCAPTCHA verification period has expired. Please reload the page.