La gente en el interior se muere por negligencia administrativa

No entiendo si dicha aseveración fue basada en información errónea que le pudieron haber dado al ministro o bien intencionalmente quedar bien ante el Ejecutivo; pero lo cierto es que al situarse uno en cualquier centro médico gubernamental del interior del país, con mucha facilidad se puede comprobar que el Ministerio de Salud Pública está ausente para atender con prontitud los requerimientos mínimos.

El malestar de la población carente y vulnerable en el interior del país, está llegando a los límites permitidos, creo por cualquier ser humano que necesita de los servicios médicos que constitucionalmente el Estado debe brindarnos; hay carencia de insumos para intensivos, no hay antibióticos básicos, analgésicos, antipiréticos, hilos de sutura, soluciones para recién nacidos, no hay insumos básicos para esterilizar equipos tanto para ventilar a recién nacidos como para adultos, ni equipo médico quirúrgico.

Los Observatorios Ciudadanos para la Paz situados en Las Verapaces y Jalapa en diferentes oportunidades han estado dando las voces de alerta desde hace dos años, el Ministerio de Salud lamentablemente se ha hecho el desentendido, no hay espacios en los cuales el ministro pueda responder con claridad y verdad a esa necesidad básica de los centros médicos a cargo del Estado en el interior, es urgente que la población pueda reaccionar para solicitar en primer lugar que ya no se permitan más muertes por negligencia en el abastecimiento de los Centro de Salud y Hospitales.

La población debe comprender y entender que el personal médico y paramédico hace su mejor esfuerzo por prestar una atención adecuada, pero no es su responsabilidad lo relativo a la ausencia de medicamentos e insumos básicos, creo que se debe iniciar ya un proceso de responsabilidad de todos los fallecimientos por el desabastecimiento de las farmacias de los Hospitales y Centros de Salud, ya no debemos de permitir que públicamente nos digan unas cosas y en la realidad existan otras totalmente diferentes como lo expuesto al inicio del presente comentario, la pregunta de los millones de guatemaltecos es: ¿Quién le miente a quién? En tanto eso de determina, los guatemaltecos mueren por negligencia administrativa.