P.I.D.: Producto Nacional, dummy

Estuardo Zapeta

El político dummy no entiende que para poder distribuir lo que el economista Wilhelm Röpke denominó el “producto social”, primero deberá producirse el “producto”.Los dummies presuponen que el “producto” preexiste y que “la problemática”, como orgásmicamente denominan a sus calenturas repartidoras, es cómo se “redistribuye”. Pobres tontos. (Röpke denominó “el producto social neto” al resultado de lo que producimos “producto social bruto” menos los costes, y eso sería en su visión la riqueza real de un país). El problema radica en que los políticos dummies no entienden ni qué es un “bien” -para ellos eso suena más a una cuestión moral- ni qué es “ser productivo”, porque ellos simplemente no lo son. Estas chorchas no están sujetas a los parámetros de “productividad” de “bienes” a la que sí estamos sujetos usted, estimado lector, y yo. No, que va, la única preocupación de estos condenados políticos es ver cómo se reparten y comparten lo que ellos no han producido, y de ahí la retahíla de normas para jodernos la vida, ya que, en la lógica torcida de esos dummies, con esa diarrea de reglas, normas, lineamientos y tanta mulada que aprueban, nosotros, los productivos, vamos a “producir más”. Si aunque sea por las causas equivocadas –corrupción, robo, malversación—los políticos dummies entendieran que está en el mejor interés de ELLOS que nosotros, “los esclavos” del Estado, usted y yo, produjésemos más bienes, léase fuésemos más productivos e incrementásemos con creces el “producto social neto”, o sea bajando los costes de producción, de veras, hasta a ellos, siendodummies, les interesaría nuestra productividad por el principio elemental de “a mayor número de bienes, más posibilidades de repartición”. Y debo recurrir al extremo de ponerles una “carnada” de su propio interés, ya que parece que no entienden que a más trabas, a más regulaciones, a más impuestos, a más restricciones, a más limitaciones, a más coerción, a menos Libertad pues, entonces menos productividad y con eso menos bienes, y hasta los corruptos dummiespierden. Aquí ni me atrevo a explicar “la función redistributiva del comercio”, el verdadero, justo, correcto, sano, limpio, y único sistema de “redistribución”, porque ese no es atractivo paradummies corruptos porque ahí tendrían que trabajar, producir y competir, y eso para ellos es para la “chusma”, no para ellos que se creen moralmente superiores, mata-tero-lá. El comercio, explica Röpke, es también una forma de “producción.” Oh sorpresa, eso sí lo entienden bien losdummies que junto con el tamagás de venenosas e improductivas leyes que limitan la producción de bienes y servicios, también añaden severas restricciones al comercio. Pobres ellos, creen que controlando la producción y el comercio que entonces tendrán “más”, pero sucede todo lo opuesto –como estos días lo demuestran los dummies venezolanos— y baja la productividad, léase la disponibilidad de bienes y servicios, y suben la corrupción, el contrabando, y el mercado negro, exactamente lo que estos mulas pretendían prevenir, pero que siempre terminan incentivando.

Artículo publicado en el diario guatemalteco Siglo 21, el día viernes 22 de noviembre 2013.

Categories:

No Responses

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


The reCAPTCHA verification period has expired. Please reload the page.