Muchos de nosotros que tenemos la oportunidad de escribir en algún medio de comunicación, interactuar en Twitter, Facebook y whatsapp para pronunciarnos respecto a lo que está sucediendo en Guatemala, nos hemos olvidado de lo que sucede en el resto del país. La información llega principalmente a las urbes y, de éstas, la ciudad de Guatemala y sus alrededores son las más importantes, por estar allí centralizado todo el poder del Estado. Los medios tienen más cobertura en las ciudades principales.
¿Qué está llegando al resto del país en cuanto a información sobre la coyuntura nacional? ¿Se habrán enterado que ayer estuvo en discusión una ley que promueve el asesinato de bebés no nacidos? ¿Sabrán que la CICIG y el TSE firmaron una carta de entendimiento con la que CICIG tendrá injerencia en las elecciones pues controlará las campañas políticas y la publicidad que hagan las diferentes agrupaciones? Dos preguntas más trascendentales, ¿les importa? ¿Entenderán la magnitud de este nefasto “entendimiento”? Con esto no quiero decir que sean ignorantes o menos educados, simplemente me cuestiono si viven el día a día de la coyuntura nacional.
El tema aquí es que nos pasamos apagando fuegos por tanto problema que surge en el gobierno central. La CICIG, aunque más callada, sigue actuando de acuerdo a su agenda, que dista mucho de la agenda de país. Es más, esa agenda es totalmente contraria a lo que Guatemala quiere y necesita. Y las acciones que ha emprendido, incluyendo las de los últimos días, van en detrimento del crecimiento y desarrollo de Guatemala, pues la forma en que lo hacen, acusando a diestra y siniestra al momento de capturar a los acusados, genera mucha más incertidumbre de la que ya hay. Esto redunda en menos inversión y, consecuentemente, menos empleos. Si no hay trabajo, no hay consumo ni inversión, y la economía se estanca.
En medio de todo esto, ¿hay alguien pensando en la desnutrición de casi la mitad de los niños menores de cinco años? ¿En qué momento nos ocupamos de generar crecimiento y desarrollo, o por lo menos pensar en cómo vamos a hacerlo? ¿Y el abandono del Estado a nivel nacional, especialmente en el área rural? El MP está ocupado en atrapar a los que CICIG acusa, en vez de pensar en cómo va a ampliar su cobertura en más Departamentos, para que quienes allí viven, tengan acceso a la justicia. El Organismo Judicial tampoco está pensando en fortalecer los juzgados que ya tiene, en implementar nuevos en áreas donde no los hay, en mejorar la eficiencia de los jueces y, simplemente, en impartir justicia “pronta y cumplida”.
La construcción de escuelas, hospitales, puentes, carreteras, está estancado por diversidad de factores. Y la población en áreas rurales, esperando, sin oportunidades de tener una vida mejor y optando por migrar hacia Estados Unidos. Esto ha llegado a tal extremo que la expectativa en ingreso de remesas este año es de US$9,000 millones. Las exportaciones totales son de aproximadamente US$11,000 millones. O sea, los chapines allá son productivos y nos están manteniendo a los chapines de aquí. No porque se vuelvan mejores al cruzar la frontera, sino porque encuentran alguna oportunidad para trabajar y generar ingresos que les permitan tener una vida digna y enviarremesas a sus familiares en Guatemala.
Hemos perdido la visión de largo plazo. Con el proceso electoral a la vuelta de la esquina, escucharemos muchos planes de gobierno, con el temor que todos digan más o menos lo mismo. Estarán llenos de promesas, como siempre, que serán incumplidas a partir del primer día de gobierno. Nos toca a quienes estamos defendiendo nuestro país, a hacer un espacio y pensar un poco en el futuro.
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