Condenados a la pobreza

Los trabajadores del Estado, en especial en los servicios públicos de salud, educación, seguridad ciudadana, infraestructura y de las municipalidades debieran estar regidos bajo un estricto sistema de servicio civil.

Requerimos profesionales de alto nivel en el servicio público, lo que significa sistemas claros de reclutamiento, selección, evaluación en servicio y ascenso. Deseamos contar con mecanismos de protección para que “los buenos” no puedan ser arbitrariamente destituidos por los gobiernos de turno y que personas sin capacidad sean reclutadas. Definitivamente, los servidores públicos deben estar debidamente remunerados, con salarios competitivos, carreras claramente establecidas y recompensados por un buen desempeño. Adicionalmente, todos los que tienen las capacidades y deseos de ser un empleado público debieran gozar del derecho de aplicar y formar parte de la tecnocracia de un país.

Es imperante que se ordene el servicio civil”.

El BID diseñó el “índice de mérito” y evaluó a los países de la región en 2004 y luego entre 2012 y 2015. Este muestra que Latinoamérica mejoró en promedio de 30 puntos a más de 40 de un total de 100. Los mejores países son: Brasil (90 puntos), seguidos por Costa Rica, Uruguay, Chile y Colombia con un promedio de 70 puntos. Sin embargo, Guatemala aún se encuentra en la misma posición con 20 puntos, sin ningún cambio, lo que es lamentable e indica una fuerte politización de las decisiones de selección, ascenso y despido de los trabajadores del gobierno.

En  los últimos días varios empleados públicos han estado presionando para lograr aumentos salariales. Lamentablemente, el abuso político y los pactos colectivos en el sector público han distorsionado completamente la carrera del servicio civil. De hecho, hasta se podría señalar que varios de los pactos suscritos en los últimos años van en contra de esta ley.

En el sector salud, en el caso de los médicos, lo que está sucediendo es que hay una gran alteración relacionada con su carrera y sus ingresos. Efectivamente, el salario base es muy bajo, pero a través del tiempo, al contratarlos por distintos renglones (011, 022, 021 y 182) y lo acordado por presiones y el pacto colectivo, se les ha otorgado una serie de bonos prácticamente sin control. Resulta que los médicos que trabajan para el Ministerio de Salud, en la actualidad, además del salario base y el complemento salarial, reciben 10 bonos mensuales, Bono 14, Aguinaldo y siete bonos anuales. Posiblemente, el bono que más llama la atención es el Bono por Antigüedad Real (BAR), que se aprobó en el Pacto Colectivo de 2013 que prácticamente es un escalafón, ya que cada cuatro años aumenta exclusivamente por la antigüedad del empleado.

Requerimos profesionales de alto nivel en el servicio público, lo que significa sistemas claros de reclutamiento, selección, evaluación en servicio y ascenso”.

Por ejemplo, un médico que tiene 24 años de trabajar medio tiempo (4 horas) en un hospital, en junio obtuvo el siguiente ingreso: Un salario base de Q1,800, más Q3,000 por siete bonos, Q4,600 por el bono BAR, lo que implica un ingreso total mensual de Q9,400. Luego de los descuentos de una cantidad de Q1,000 (Auxilio Póstumo, ISR, IGSS y Montepío) su ingreso mensual es de Q8,400. Por supuesto que esta forma de pago no tiene relación alguna con su desempeño, ni con sus estudios y actualización como profesional, sino exclusivamente por años de servicio y por presiones políticas y sindicalistas. Además, castiga su jubilación, ya que cuando se retire recibirá solo Q1,800 mensuales.

Debemos solicitar información al gobierno de la situación de los trabajadores de salud, sus ingresos y de los arreglos que llegaron con el presidente, Jimmy Morales, y el vicepresidente, Jafeth Cabrera, el pasado 25 de julio. Según algunos cálculos, un médico en el reglón 011 o 022 tiene un ingreso mensual promedio al laborar 8 horas de Q15,800, si trabaja 6 horas, Q11,400, y de Q7,800 si es por 4 horas, los cuales, en relación con otros ingresos salariales en el país, no son despreciables.

Es imperante que se ordene el servicio civil, de lo contrario seguiremos con malos servicios públicos, de alto costo, condenando al país a la pobreza. Debe mejorarse la meritocracia, así como la evaluación del desempeño y gestión de compensación de los trabajadores. ¿Qué opina de los aumentos salariales masivos a los empleados públicos sin medir los resultados? ¿Cómo ordenamos el servicio civil en Guatemala? ¿Cuánto debiera ganar un médico en el sector público?


Por María del Carmen Aceña

https://www.publinews.gt/gt/opinion/2018/08/05/condenados-la-pobreza.html

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