EL SISTEMA POLÍTICO SUFRIÓ un duro remezón con las revelaciones del Ministerio Público y la Cicig. Si bien es el Partido Patriota el que está sentado en el banquillo de los acusados, esa estructura de macrocriminalidad ha sido un modelo que han desarrollado en diferentes modalidades y etapas los principales partidos del país. El quehacer político en Guatemala no ha tenido como finalidad el impulso de la democracia o el desarrollo, sino la creación de mafias para saquear los fondos del Estado. En el país no existen partidos ideológicos o programáticos, sino grupos de políticos rentistas. Un ejemplo es el transfuguismo porque a los diputados no los mueve ninguna identificación política o ideológica. Si en el camino no se hubiera cruzado Iván Velásquez, después del reinado del PP le hubiera correspondido administrar el negocio ilícito a Líder, pero como fracasó en el intento, ahora parte de esas redes de corrupción han migrado con los diputados que aterrizaron en la bancada de FCN-Nación porque creen que ahí podrán hacer negocios.
PERO NO ESTAMOS HABLANDO solo de estructuras partidarias, ya que estas para poder desarrollar las redes criminales han necesitado agentes y aliados. La investigación del MP y Cicig demostró cómo Pérez Molina y Baldetti desde el 2007 intentaron dar apariencia de legalidad a esas redes, las cuales pudieron operar con el respaldo de prominentes miembros de la cúpula del poder empresarial, principalmente el financiero. Basta ver cómo Flavio Montenegro, gerente general del Banco G&T Continental, y Fernando Peña, presidente ejecutivo de Banrural, pusieron a disposición de esa estructura sus servicios financieros. Ahora ambos están prófugos de la justicia y señalados del delito de lavado de activos. Por eso es vergonzosa la posición del Banco G&T Continental cuando en su comunicado se solidariza con Montenegro porque pareciera asumir una actitud cómplice con su directivo.
ESTA INVESTIGACIÓN TAMBIÉN muestra el papel nefasto del monopolio televisivo de Ángel González. Desde hace décadas, este individuo se ha convertido en el poder tras el trono de varios gobiernos y uno a uno diferentes candidatos presidenciales han hecho romería para hincarse ante él en Miami. El Fantasma, como también se le conoce, ha sido generoso con propaganda para los partidos que cree que van a ganar las elecciones, pero luego se cobra a precio de oro, además de mantener atada a la población a la basura que transmiten sus canales televisivos. González invirtió Q17 millones en la campaña proselitista de Pérez Molina y Baldetti y a cambio recibió Q216 millones en contratos publicitarios, un negocio redondo. Pérez Molina también benefició en el 2012 a ese monopolio con la prórroga de la concesión de frecuencias radioeléctricas por otros 20 años. Hoy, Alba Lorenzana, esposa de González y representante legal de ese consorcio que lleva su nombre —Albavisión— tiene orden de captura internacional por financiamiento ilícito.
ESTAMOS VIENDO EL COLAPSO de la estructura criminal del PP, pero eso no implica que esas redes mafiosas ya estén liquidadas. La cooptación del Estado de Guatemala viene desde el corazón de las estructuras contrainsurgentes de los años 70 y 80 que mutaron de la guerra a los negocios ilícitos. Estamos frente a un sistema de corrupción que tiene la capacidad de recomponerse, por lo que es fundamental cimentar controles de todo tipo. El sistema político está pervertido y es necesario reconfigurarlo para evitar que esas redes mafiosas vuelvan a echar raíces.
No Responses