A tres semanas de las elecciones

A tres semanas de las elecciones, y el voto urbano está dividido. Una gran parte ha optado por apoyar al candidato antipolítico, Jimmy Morales. El argumento es que, es mejor tener a alguien que no sepa nada de política y con total inexperiencia en el tema, que un mañoso que ya se las sabe todas y es parte del sistema. Certeramente, Morales se ha convertido en ese candidato de los hastiados por la política, que prefieren darle el voto al “comediante” –como algunos tratan de menospreciar su profesión, aunque él por lo menos la tiene, la mayoría de políticos que ha estado en el poder, si mucho llega a bachiller. Aún con las asociaciones que le han reclamado de militares de la vieja guarda, o de su fotografía y especulada amistad con Byron Lima, Morales sigue subiendo, y en la última encuesta publicada en Prensa Libre, incluso, arriba de Sandra Torres. En la encuesta digital publicada por Siglo.21, Morales aparece como el candidato favorito.

A tres semanas de las elecciones, y Sandra se mantiene callada, celebrando el desgaste de Baldizón y observando con cautela el ascenso de Jimmy. Ya nadie pareciera recordar que Sandra, detrás de los anuncios de dientes blanqueados, perlas y su frase “Cuenta conmigo” (manita al corazón), hace cuatro años era la que nos tenía manifestando de blanco en la plaza, deja vú. Era la que se divorciaba de su marido para “casarse con el pueblo”, en medio de ridículos llantos en la Corte de Constitucionalidad. Sin embargo, su estrategia de la bolsita (para el área rural) y una imagen suavizada y amigable (para ganarse el voto urbano) la tiene placenteramente en un empate técnico con Jimmy Morales.

A tres semanas de las elecciones y Zury sube, pero no como el área urbana creyera. En el interior, su nombre es poco conocido y las probabilidades que pegue un levantón en tres semanas es poco probable. Ella pudo ser ese voto urbano que ahora está con Jimmy, si tan solo no tuviera la sombra de su padre, de su hermano, de su pasado político, del FRG.

A tres semanas de las elecciones y se escucha de forma latente en las calles: no hay por quien votar. Canela dice que sí, pero la opinión pública: “Es que ninguno convence”. Giammattei tiene buenos argumentos, pero su exposure ha sido pobre para las masas. Los ciudadanos no pueden estar más desencantados, de ver que las reformas que se proponen para darle seriedad a la Ley Electoral y de Partidos Políticos no caminan gracias al oportunismo y vinculación conveniente de Líder y Patriota. ¿Voto nulo? En estos momentos, es regalarle el voto a Baldizón. ¿Anti voto? Jimmy Morales. ¿Más de lo mismo? Sandra.