JORGE JACOBS
La puñalada fiscal fue un completo fracaso, como se les advirtió que sería. No porque haya “caído la recaudación” como mentirosamente quieren hacer creer las autoridades, sino porque su concepción de fondo estaba errada, -aparte de todas las inconstitucionalidades que tenía- lo que ha hecho que los guatemaltecos en general estemos peor que antes de que nos la clavaran en la espalda. Ahora que se ven los resultados y no solo las voces de quienes en su momento nos opusimos, bien harían los gobernantes en dar marcha atrás y tomar una senda más apropiada. ¿Tendrán el carácter para hacerlo? El error de fondo es considerar el impuesto sobre la renta (ISR) una herramienta de “redistribución de la riqueza”, concepto con el cual se ha vendido desde que se popularizó hace menos de un siglo, pero que ha probado en ese mismo tiempo ser totalmente falso.
Si profundizamos un poco más, es un error aún más grande considerar que la función del gobierno es “redistribuir la riqueza”. Por supuesto, quien considere que esa es su función, muy probablemente llegará a la conclusión de que, como el ISR supuestamente cumple ese propósito, entonces es la herramienta que se debe utilizar.
Le propongo que por un momento olvide esos paradigmas y se enfoque en otro: cómo salir de la pobreza. Que yo sepa, desde la antigüedad hasta la fecha, si una cosa ha quedado clara es que la única forma de salir de la pobreza es creando riqueza. Esto es válido a nivel personal, familiar, también como sociedad y como país. Incluso para poder “redistribuir la riqueza”, primero hay que crearla.
¿Cómo entonces se crea la riqueza? El proceso también está bastante estudiado. En su forma más simple, inicia con las transacciones libres y voluntarias que realizamos cada día, luego implica no gastar todo lo que uno genera sino guardar un poco —ahorro—. Este, con el tiempo y si lo invertimos bien, nos permite generar más ingresos, que a su vez van generando más ahorros, convirtiéndose en una bola de nieve cada vez mayor.
¿Cómo crean los ahorros más riqueza? A través de la inversión. Ya sea que lo hagamos nosotros mismos u otras personas a través de un banco. Se necesita de esos ahorros para poner una empresa, para generar más empleo, para producir más cosas a menores precios.
¿Qué tiene que ver el ISR en este proceso? Indistintamente del nombre que le pusieron, su verdadero efecto es sobre el rendimiento de las inversiones. Quien va a realizar una inversión sopesa muchos factores, siendo el principal el rendimiento que le va a generar. Bajo condiciones similares, muy probablemente va a preferir una que le rinda un diez por ciento anual en lugar de una que le produzca un cinco por ciento. Y es allí donde el ISR afecta, reduciendo el rendimiento de las inversiones.
Si no me cree, vea el debate que hay actualmente sobre la llamada “Ley de inversión y empleo”. Lo que hace para “fomentar” las inversiones es eliminarles el pago del ISR a algunas empresas —siendo este “algunas” su principal pecado—. ¿Qué se debe hacer entonces para revertir los daños ocasionados por la puñalada fiscal? Haré mis recomendaciones la semana entrante.
Publicado el 10 de julio de 2014 enwww.prensalibre.com http://www.prensalibre.com/opinion/Punalada-fracasada_0_1172282773.html
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