Un funcionario sin sensibilidad social.
El director ejecutivo del Renap, Rudy Gallardo, un pecador impenitente persiste en defender lo indefendible: el despilfarro de Q229,497 en viáticos de 11 afortunados trabajadores del Renap, que fueron a Las Vegas a prerregistrar a nuestros migrantes. Y lo peor de todo, es que el funcionario asegura que no cambiará su rutina viajera. Si para prerregistrar a algunos chapines de Las Vegas necesitó de varios días y de cientos de miles de quetzales, no le alcanzará el tiempo en el cargo ni tampoco todos los fondos del presupuesto del Estado para hacerlo con todos los guatemaltecos que viven en Estados Unidos. Es solo cuestión de matemáticas. A mi los números no me cuadran. Ni las justificaciones tampoco.
El viaje de once trabajadores del Renap a Las Vegas no lo hubiera autorizado ninguna junta directiva de una empresa privada, pero como los fondos son públicos, y así son de todos y no son de nadie, se puede hacer chinche con ellos porque esos viajecitos no tienen valladar posible.
A funcionarios como Gallardo habría que darles un curso intensivo del país en el que viven. Llevarlos a Camotán a ver los problemas de hambre que padecen allí nuestros connacionales, organizarles un tour por los hospitales nacionales para que vean las condiciones precarias en que se encuentran los pacientes por falta de recursos o darles un viajecito, no de placer, a contemplar alumnos recibiendo clases en aulas improvisadas.
Este tipo de funcionarios debería entender que no viven en Dubai o Qatar, países situados sobre mantos de petróleo y de gas natural, y en donde por no haber rezagos sociales no importa el desperdicio de los recursos públicos, sino en un país pobre, en el que la racionalidad del gasto exige que cada centavo del erario nacional deba ser analizado y escrutado.
En Guatemala, gracias a un medio periodístico no domesticado por el gobierno de turno (Portillo, Berger, Colom, Pérez, etc.), como es elPeriódico, es posible darles la sanción moral pública a estos funcionarios, porque tradicionalmente en Guatelinda la corrupción da inamovilidad.
A tenor de sus recientes declaraciones, Gallardo no entendió la lectura pública que se hizo de su viaje a la meca de juego y de la juerga. Y como quiere volver a las andadas, habría que aconsejarle que ahora vaya a prerregistrar a los chapines que trabajan en Disney. Otros cinco días allí a 11 trabajadores del Renap, pagados con el erario nacional, no les caería mal. Y que se queden allí, porque viven un mundo de ensueño. No viven en Guatemala. Y de paso, saludos a Mickey Mouse.
Publicado el 13 de Septiembre 2013 en www.elperidico.com.gt por Gonzalo Asturias http://www.elperiodico.com.gt/es/20130913/opinion/234383/
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