Formación coherente

En Guatemala es necesariotrabajar para que sea una realidad que más ciudadanos alcancen los derechos a la alimentación, vivienda, seguridad, educación, salud, acceso a los distintos servicios básicos y que se cumplan las condiciones para vivir con dignidad, lo cual se traduce en justicia social, convivencia pacífica y armónica, y desarrollo en igualdad de oportunidades y condiciones, dicho en una palabra, en paz. Alcanzar la paz implica la participación activa de todos y representa un reto para la educación del país,

puesto que a lo largo de los años de formación se hace necesario desarrollar los saberes cognoscitivos, procedimentales y actitudinales que motiven a la persona a participar consciente y responsablemente para incidir en forma positiva en la transformación de la sociedad. Si el ejercicio de la ciudadanía se edifica desde la formación básica, se constituirá en una forma de vida que fortalecerá las relaciones entre hombres y sociedad, y promoverá la construcción de la paz.

Es ahí donde la formación cívica o ciudadana cobra relevancia en el currículo de todos los niveles educativos, y es necesario e indispensable propiciar las condiciones para llevarla a la vida práctica, para que permita a las personas ser conscientes de ejercer su dignidad y reconocer la de los demás.

Por medio de la formación ciudadana se toma consciencia sobre los derechos y obligaciones consigo mismo, con los demás y con la nación. Abre oportunidades para desarrollar liderazgo, capacidad de resolución de conflictos, actuar con asertividad, seguridad, confianza, libertad, responsabilidad, laboriosidad y honestidad; asimismo, permite crear una consciencia de la realidad, utilizando críticamente los conocimientos de los procesos históricos, para comprender el presente y proponer proyectos de desarrollo social, valorando la diversidad cultural, el ejercicio democrático y proyectándose a futuro para asegurar el desarrollo humano y sostenible en condiciones de equidad, que contribuyan a superar las desigualdades de la nación.

La formación ciudadana abre el acceso a las futuras generaciones para que se desarrollen como auténticos ciudadanos, favorezcan el proceso de cambio y trabajen conjuntamente por un proyecto de nación, que permita el desarrollo de cada uno en óptimas condiciones, basadas en el diálogo, la justicia, la libertad, la tolerancia, la solidaridad y el respeto a las diferencias. Afrontar este reto demanda la participación de familia, Iglesia, escuela, universidades, Estado, industria, medios de comunicación, en sí, de todos los sectores de la sociedad, ya que desde su campo de acción y con su ejemplo influyen en el ejercicio de la paz.

Publicado el 02 de Septiembre 2013 en www.prensalibre.com por ÍNGRID AMBROSY
http://www.prensalibre.com/opinion/Formacion-coherente_0_985101485.html
 

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