Una de las principales conclusiones del informe de anual de la Alianza para el Congreso Eficiente es que las comisiones de trabajo del Organismo Legislativo no cumplen con su objetivo, por lo que se debería reformular su funcionamiento.
Luego de monitorear siete comisiones de trabajo, la Alianza para el Congreso Eficiente concluyó que en el último trimestre del 2018 ninguna cumplió con reunirse por lo menos dos veces al mes, como lo estipula la Ley Orgánica del Organismo Legislativo.
La organización también incluyó en su informe, presentado este miércoles, que solamente en tres de las 16 reuniones de las comisiones evaluadas se tuvo la asistencia de, por lo menos, la mitad más uno de los integrantes.
“Las comisiones de trabajo, que son el corazón del Congreso, deben funcionar; lo que pudimos ver, con el monitoreo del 2018, es que hay muchas comisiones que celebran reuniones no precisamente como dice la ley, y la integración casi nunca se logra”, señaló María del Carmen Aceña, analista del Centro de Investigación Económicas Nacionales (CIEN), que presentó el informe.
La experta señaló que debe haber “una mejora sustantiva” de las comisiones de trabajo para que las propuestas de ley sean tratadas de forma técnica y eso haga que se el Congreso trabaje de forma más eficiente.
Debido a eso, la Alianza para el Congreso Eficiente recomendó a los legisladores que analicen la posibilidad de reducir el número de comisiones que hay en el Congreso y que además se pueda documentar de forma audiovisual el trabajo de estas, de manera que se tenga un mejor control y fiscalización y se garantice así la eficiencia del trabajo legislativo.
Descargo
Estuardo Galdámez, primer secretario de la Junta Directiva, fue consulado sobre el infirme y señaló que está conciencie de los esfuerzos que hace el congreso para hacerlo más transparente y eficiente.
Sobre la recomendación de analizar la forma en que trabajan las comisiones e incluso de reducir el número de salas de trabajo señaló que no es culpa de los legisladores sino del transfuguismo.
“Esto sucede por el efecto del transfuguismo, hay muchas comisiones y pocos diputados que la pueden presidir, entonces hay diputados que se traslapan con el mismo horario de las comisiones”, aseguró Galdámez.
Aseveró que no es irresponsabilidad de los diputados, destacó que esto tampoco es “un problema de corrupción”, sino “que los diputados no pueden asistir a dos comisiones al mismo tiempo”.
“Es algo que requiere un análisis desde el aspecto orgánico de las comisiones. Los diputados no coinciden”, acotó el legislador.
De forma institucional el Congreso se pronunció sobre el informe y señaló que se ha “tomado nota de sus recomendaciones, así como de las que hicieron el año pasado”.
“Prueba de ello son las mejoras en los indicadores como el Índice Latinoamericano de Transparencia Legislativa con una mejoría del 17 por ciento, la más alta de toda la región”, precisó la información de la Dirección de Comunicación Social.
Otras conclusiones
- Según el reporte, durante el 2018 se realizaron 82 sesiones plenarias, de estas, 67 fueron ordinarias, 12 extraordinarias y tres solemnes.
- Ningún diputado asistió a la totalidad de las sesiones y solamente ocho de 158 asistieron a más del 95 por ciento de las sesiones.
- Diez diputados asistieron a menos del 66 por ciento de las sesiones, en los casos extremos se tiene a la diputada Stella Alonzo que solo acudió al 50 por ciento de las sesiones y el diputado Gustavo Medrano, que solo asistió al 30 por ciento de las sesiones del año.
- Por esta situación la Alianza para el Congreso Eficiente recomendó que se debe tomar una medida drástica y es que se amoneste administrativamente a los diputados faltistas como lo permite la Ley Orgánica del Organismo Legislativo.
- Incluso de ser necesario se propone que se declare vacante la curul de los legisladores que no acudan al Congreso para cumplir con sus obligaciones legislativas.
- El Congreso mejoró en los últimos dos años en el ranquin del Índice Latinoamericano de Transparencia Legislativa, pues es el mejor de la región con 77 puntos en na región donde el promedio es 59.
- Si bien, se mejoró en transparencia, esto no necesariamente se traduce en eficiencia, por lo que instaron al Congreso a seguir con su labor para mejorar en la transparencia.
- Durante el 2018 el presupuesto del Congreso era de Q913.4 millones, de lo cual se ejecutó el 82 por ciento, lo que podría significar que cada diputado le costó al erario nacional Q4.7 millones al año.
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