La petición del licenciado Galindo se basa en que Paz y Paz ha acumulado 13 impedimentos de los 21 que indica la ley como causales para que la Fiscal General deba abandonar el cargo. Es importante resaltar que, según la legislación respectiva, un solo impedimento es motivo suficiente para que el funcionario al mando del MP deba renunciar. Ya que la Ley Orgánica que rige dicha instancia señala 2 días hábiles para resolver un asunto de Apartamiento, debido a los feriados el jueves próximo estaría venciendo dicho plazo.
Entre los impedimentos señalados están: duda de su imparcialidad, adelanto de opinión, actuación como juez y parte, violación de derechos humanos, interés personal y conflicto de intereses, entre otros. La petición consta de 227 páginas en las que Galindo Ruiz respalda de manera minuciosa sus argumentos.
Paz y Paz se encuentra frente a una disyuntiva: dejar clara su honorabilidad renunciando a un cargo frente al que se encuentra deslegitimada, o buscarle recovecos a la ley y aferrarse a la posición que ha usado como instrumento de su ideología de extrema izquierda para conseguir venganza contra el Ejército. Porque ha demostrado que ese, y no otro, ha sido su principal interés como Fiscal General.
Nunca había sido tan notoria la injerencia extranjera en nuestros asuntos. Debemos ser los guatemaltecos quienes resolvamos nuestros problemas. No podemos permitir que Francisco Dall’Anese salga en defensa de Claudia Paz y Paz retorciendo la ley aquí como consta que lo hizo en Costa Rica, en donde enfrenta serios problemas legales de índole penal. El embajador de los Estados Unidos y el cuerpo diplomático deben guardar una respetuosa distancia ante tan delicado asunto.
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